En Paracuellos de Jarama, reside la historia de una mujer extraordinaria, Antonia Herranz, quien, a pesar de no tener descendientes directos en el municipio, ha dejado una huella imborrable en la memoria colectiva por su inmensa generosidad y filantropía.
¿Quién fue Antonia Herranz?
En 1924, el Ayuntamiento de Paracuellos le otorgó el título de Hija Predilecta, un reconocimiento que solo se concede a aquellos que, nacidos en el lugar, han destacado de forma excepcional por sus méritos personales y servicios prestados en beneficio de la villa.
Una vida dedicada a la caridad
En una época marcada por la pobreza y las dificultades económicas, Antonia Herranz se convirtió en un faro de esperanza para los vecinos de Paracuellos.
Su legado:
- Donación de 2.000 pesetas para la construcción de la Fuente de la Salud en 1907.
- Arreglo y mejora de la vía pública por un importe de 6.000 pesetas en 1924.
- Donación de 1.000 pesetas para la escuela de las niñas y 500 pesetas para la de los niños en 1928.
Un homenaje en Paracuellos más allá del nombre de una calle
Si bien el cambio de nombre de la calle del Olivo por el de Antonia Herranz en 1924 fue un gesto de reconocimiento, los cronistas oficiales de Paracuellos, D. Luis Yuste y D. Javier Nájera, proponen ir más allá.
Propuestas para honrar su memoria:
- Depositar un ramo de flores en su sepultura durante las fiestas patronales.
- Crear un premio con su nombre al MVP (Más Valioso Paracuelense).
- Fomentar la investigación y divulgación de su historia.
Un recordatorio de la importancia de la memoria histórica
La historia de Antonia Herranz nos recuerda la importancia de preservar la memoria de aquellos que han contribuido al bien común. Su legado debe servir como ejemplo para las generaciones futuras, inspirándolas a actuar con generosidad y compromiso por el bienestar de su comunidad.
Este artículo ha sido elaborado a partir de la información proporcionada por los cronistas oficiales de Paracuellos de Jarama, D. Luis Yuste y D. Javier Nájera. Su valiosa labor de investigación y divulgación de la historia local ha sido fundamental para rescatar del olvido la figura de Antonia Herranz, una mujer ejemplar que merece ser recordada y homenajeada por las generaciones venideras.
Agradecemos profundamente su colaboración en la elaboración de este artículo y animamos a todos los lectores a profundizar en la historia de Paracuellos de Jarama a través de sus escritos y trabajos de investigación.